Yelena Hagooli ha hecho todo lo posible para darle a su hijo de 4 años el mejor comienzo en la vida. Lo llevaba a la biblioteca cada semana, le daba los alimentos más saludables, dejó su trabajo para cuidarlo e incluso se mudó a Beverly Hills, porque había escuchado cosas muy buenas de las escuelas.
Pero la decisión con la que está lidiando ahora parece más trascendental: ¿Debería mantenerlo en su querido preescolar un año más o enviarlo al recién ampliado kindergarten transicional (TK, por sus siglas en inglés) en su escuela pública local?
Ella analizó la pregunta desde todos los ángulos, e incluso pagó un depósito no reembolsable de $1,000 para asegurarle su cupo en el preescolar y así darse más tiempo. Trasladarlo a TK le ahorraría $20,000 al año en matrícula, y sus dos hijos podrían asistir a la misma escuela. Pero ha sido difícil obtener detalles del nuevo programa de TK. Y su hijo menor está contento donde está, pues está inmerso en su comunidad y en las tradiciones judías.
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“En un momento pensamos que estará bien en TK y al siguiente nos decimos, ‘Oh, es solo un bebé y no está listo’”, dijo Hagooli. “ Ahora los padres están muy presionados porque sabemos que los primeros años son muy importantes. Entonces, ¿qué hacemos ahora para prepararlos para que les vaya bien en la escuela, para que ingresen a la universidad correcta, etc., etc.?”
A medida que la mayor expansión de la educación pública en California -la incorporación del TK, un nuevo grado para niños de 4 años- concluye su segundo año, decenas de miles de padres de todo el estado se enfrentan a sus propias versiones de la pregunta de Hagooli. Sus decisiones individuales pueden determinar el éxito del programa.
Los padres pueden elegir entre una gran variedad de programas de primera infancia, que van desde la guardería al preescolar, pasando por el kindergarten transicional. Esto es lo que ofrecen.
California está en medio de una iniciativa de $2.7 mil millones para proporcionar un año adicional de educación gratuita y de alta calidad durante los cruciales primeros años. Sin embargo, aunque TK es un programa estatal, los detalles que a menudo más importan a los padres, el equilibrio entre el juego y lo académico y cómo difiere el programa del preescolar, varían mucho según el distrito.
“Le hemos dicho a los padres que éste es uno de los momentos más importantes de la vida de sus hijos, pero hemos dejado este vacío de información”, dijo Anna Markowitz, profesora de la Escuela de Educación e Información de la Universidad de California en Los Ángeles. “Son preguntas muy importantes y realmente no tenemos un plan para responderlas”.
Esto es lo que sabemos hasta ahora:
¿Qué es el kindergarten transicional?
El TK ha existido desde 2012, pero anteriormente sólo era para niños que cumplían años en otoño y no estaba disponible en todos los distritos. Pero para el año escolar 2025-2026, el TK ofrecerá educación pública gratuita abierta a todos los niños de 4 años, en lo que se espera que se convierta en el programa de preescolar universal más grande del país.
Hasta ahora, a pesar del crecimiento general del programa, muchos padres parecen seguir con lo que conocen. La Oficina del Analista Legislativo estima que la asistencia diaria promedio en TK este año es de aproximadamente 125,000. Se trata de un aumento significativo con respecto al año pasado, pero todavía lejos de los 400.000 que el gobernador Gavin Newsom dijo que espera inscribir para 2025, cuando el programa esté en pleno apogeo.
California’s 4-year-olds are entering transitional kindergarten. But many young learners aren’t fully potty-trained, an issue public schools are grappling with.
El estado y distritos como el LAUSD han estado trabajando para dar a conocer el TK. Una reciente encuesta RAPID de la Universidad de Stanford reveló que el 83% de los padres con hijos de 5 años o menos en California dice conocer el programa TK. Y tres cuartas partes de los padres de las escuelas públicas apoyan el preescolar financiado por el estado para niños de 4 años, según una encuesta publicada recientemente por el Instituto de Políticas Públicas de California.
¿Cuál es la diferencia entre TK y el preescolar?
Los padres tienen una amplia gama de opciones para elegir cuando se trata de preescolar, desde programas basados en la fe en templos e iglesias hasta escuelas Montessori y de la naturaleza. Algunos se centran en el juego libre, mientras que otros dedican más tiempo a enseñar a los niños a aprender letras y números. Por lo general, al seleccionar un aula de preescolar, los padres pueden visitarla, preguntar sobre lo que se enseña y seleccionar el programa que mejor se adapte a sus valores y necesidades.
El TK suele variar ampliamente según el distrito y el aula individual. Pero hay varias consistencias en todo el estado.
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Por lo general, al seleccionar un aula de preescolar, los padres pueden visitarla, preguntar sobre lo que se enseña y seleccionar el programa que mejor se adapte a sus valores y necesidades.
Las aulas preescolares estatales de California tienen una proporción de 8 a 1.
Para Hagooli, esto puede ser un factor decisivo. Su hijo es tranquilo y observador, y le preocupa que en un clase más grande, el maestro no presté suficiente atención a sus necesidades.
Pero los maestros en un aula de TK generalmente tienen más educación que los maestros de preescolar, incluido un título universitario y una credencial de enseñanza. Para 2025, los maestros de TK también necesitarán tener 24 unidades de educación o desarrollo de la primera infancia.
“Los maestros de TK probablemente estén proporcionando actividades de aprendizaje estructuradas y planificadas con más frecuencia porque están capacitados para enseñar”, dijo Deborah Stipek, profesora de educación en la Universidad de Stanford. Los maestros de TK ganan aproximadamente el doble que los de preescolar. “A algunos les preocupa que el TK sea demasiado estructurado para los niños pequeños”, agregó.
Parents can choose from an assortment of early childhood programs, ranging from child care to preschool to transitional kindergarten. Here’s what they offer.
¿Quién es elegible para TK en California?
Todos los niños de California que cumplan 4 años antes del 2 de junio serán elegibles para inscribirse en TK en el otoño. Algunos distritos, como LAUSD y San Diego Unified, ya están admitiendo a todos los niños que cumplan 4 años antes del 1 de septiembre. El grado no es obligatorio.
Los distritos están obligados a ofrecer al menos tres horas de instrucción. Para los padres que requieren cuidado infantil adicional, las escuelas suelen ofrecer programas extraescolares, aunque a menudo son de pago.
TK classrooms often expect a higher degree of independence from students, which may be challenging for younger children. TK does not offer a nap, for example, and most provide minimal assistance with toileting. Por el contrario, la mayoría de los centros preescolares todavía ofrecen siestas, cambio de pañales y otras ayudas para ir al baño al mismo grupo de edad.
Las aulas de TK suelen esperar un mayor grado de independencia de los alumnos, lo que puede suponer un reto para los niños más pequeños. Por ejemplo, el TK no ofrece siesta y la mayoría proporciona una ayuda mínima para ir al baño.
Para Micaela Elias, eso fue motivo suficiente para mantener a su hija en el Children’s Institute de Vernon, un programa Head Start. Su hija aún duerne la siesta, y le preocupaba que en TK, nadie la ayudaría a abrir sus bocadillos o la cuidara como lo hacen sus maestros de preescolar. “Todavía es muy pequeña”, dijo Elias. Dado que Head Start y el preescolar estatal también son gratuitos, el costo no es un problema para muchas familias de bajos ingresos.
Para Malinda Cvitkovic, de Ventura, las mayores expectativas de independencia son una ventaja.En TK, su hijo aprendió a formar una línea, a escribir su nombre con lápiz en lugar de crayón y a sentirse seguro en un ambiente escolar, todo ello mientras jugaba y se divertía. En preescolar, dijo, estaba mucho más “mimado”. Ahora trabaja en su clase de preescolar todas las semanas y dice que nota “una gran diferencia entre un niño que hizo TK y un niño que no hizo TK”.
¿Qué aprenden los estudiantes de TK en California?
A los alumnos de TK se les enseña según los Fundamentos de Aprendizaje Preescolar de California, que fueron creados por el Departamento de Educación y están destinados a todos los programas preescolares del estado. Es probable que este verano se publique una nueva versión, que avanzará los fundamentos hasta el TK y los 5½ años.
Los fundamentos incluyen cientos de páginas de expectativas detalladas sobre lo que los niños deben aprender por edad en materia de desarrollo socioemocional, lenguaje y alfabetización, matemáticas, arte, ciencias e incluso salud. A la edad de 5 años, por ejemplo, los niños deberían saber cómo:
- Regular sus sentimientos e impulsos de forma más coherente
- Participar positiva y eficazmente en un grupo
- Escribir su nombre casi correctamente
- Conocer más de la mitad de las letras mayúsculas y minúsculas
- Comprender y utilizar frases cada vez más complicadas
- Comprender y utilizar una gramática adecuada a su edad
- Crear dibujos y pinturas que representen personas, animales y objetos
- Comparar dos objetos por su longitud, peso y capacidad
- Resolver problemas sencillos de suma y resta
- Reconocer y duplicar patrones sencillos.
¿Es el TK más académico que el preescolar?
En una FAQ en línea, el departamento de educación del estado llama al TK “el primer año de un programa de kindergarten de dos años que utiliza un plan de estudios de kindergarten modificado”.
Esa descripción fue una “decisión desafortunada”, dijo Alix Gallagher, directora de asociaciones estratégicas para Análisis de Políticas para la Educación de California, con sede en la Universidad de Stanford. Muchos distritos escolares interpretaron eso como que TK debería parecerse al kindergarten –un grado con el que ya estaban familiarizados–, en lugar del “plan de estudios basado en el juego apropiado para el desarrollo” que el departamento denomina TK en otra pregunta frecuente para los padres.
Pero como cada distrito puede elegir su propio plan de estudios, la realidad varía mucho. En algunas aulas, los niños se sientan en pupitres hacen hojas de letras. En otros, están explorando al aire libre, construyendo Legos y juegan a inventar cosas.
“Creo que es muy difícil para los padres en este momento”, dijo Markowitz de UCLA. “Pienso que lo mejor es que decidan si creen que su hijo está listo para estar en un kindergarten”.
California law restricts preschools from expelling kids, yet an increase in behavioral problems since the pandemic is proving a big challenge for teachers.
En 2016, la última vez que se realizó una evaluación importante del programa de TK del estado, los investigadores encontraron que los alumnos que asistieron a TK ingresaron al kindergarten con habilidades matemáticas y de alfabetización más fuertes. Pero también encontraron que los maestros dedicaban el 59% de su tiempo en el aula a la “instrucción didáctica”, que significa impartir información e instrucciones a los estudiantes en lugar de fomentar el pensamiento independiente y el juego.
“Ésa sería mi pedagogía menos favorita”, dijo Linda Espinosa, profesora de educación en la Universidad de Missouri y copresidenta del comité que escribió un reciente informe sobre el plan de estudios preescolares para las Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina.
Los niños deben aprender matemáticas y alfabetización, afirma, pero lo académico y el juego no deberían ser “una cosa o la otra”. En lugar de que un maestro les enseñe sus letras y números desde el frente del aula, los niños en un aula bien dirigida deberían jugar y explorar materiales para aprender de manera alegre e imaginativa. “Si el entorno está configurado correctamente, el aprendizaje basado en el juego puede ser muy académico”, dijo Espinosa.
Esto está sucediendo en algunas aulas de TK, especialmente en distritos que tienen programas de preescolares desde hace tiempo, donde TK es más probable que esté basado en el juego, explica Hanna Melnick, quien codirige el equipo de Aprendizaje Infantil Temprano del Learning Policy Institute, una organización sin fines de lucro.
El año pasado, más de la mitad de las aulas de TK dijeron que utilizaban un plan de estudios de alfabetización y aprendizaje socioemocional desarrollado para niños en edad preescolar. Pero aproximadamente una cuarta parte estaba usando un plan de estudios de kindergarten.
“Esas son las que pueden ser más preocupantes”, dijo Melnick, agregando que algunas de ellas podrían estar combinadas con aulas de TK-Kindergarten “Mi opinión es que las personas se están educando más (sobre el aprendizaje temprano) con el tiempo. Pero creo que todavía vamos a tener algunas dificultades, especialmente en distritos más pequeños y con menos recursos”.
Para algunos padres, el énfasis en el aprendizaje es bienvenido. Charlotte Angeles, higienista dental en Westchester, dijo que le encantó que el TK de su hijo incluyera más tiempo de instrucción estructurada, que incluía centros con hojas de trabajo para practicar sus letras y números. “No quiero que nunca se quede atrás. Fue un buen paso y una buena transición para tener ese aspecto académico mezclado con el juego”.
¿Cómo pueden los padres tomar la mejor decisión de TK para su hijo?
La decisión de enviar o no a un niño a un programa de TK suele depender de los pormenores de la situación familiar y de las opciones escolares: ¿Cuál es el horario del programa? ¿Qué tan lejos está la escuela de casa? ¿Hay otro niño ya en la escuela? Y ¿qué opinan otros padres del maestro?
Pero en términos de decidir si el aula y el programa son adecuados para un niño, no hay sustituto para una visita en persona, dijo Jade Jenkins, profesora de educación en UC Irvine. Muchas escuelas ofrecen visits guiadas a los padres, que les permiten ver la configuración del aula y, a veces, observar la clase en acción.
Para asegurarse de que una clase sea apropiada para el desarrollo, Jenkins sugiere buscar mucho espacio abierto, mesas de grupo en lugar de pupitres y un entorno que dedicado principalmente a permitir que los niños exploren de forma independiente. Las áreas sensoriales y actividades como mesas de arena y una cocina de juego o un rincón de disfraces, son buenos indicadores de un programa basado en el juego. Las carpetas llenas de hojas de trabajo no lo son. Idealmente, las aulas deberían tener su propio baño y acceso al exterior.
“No queremos que TK se parezca al kindergarten”, dijo Jenkins.
Este artículo es parte de la iniciativa de educación infantil temprana del Times, que se centra en el aprendizaje y el desarrollo de los niños de California desde el nacimiento hasta los 5 años. Para obtener más información sobre la iniciativa y sus patrocinadores filantrópicos, visite latimes.com/earlyed.
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