Los Lakers realmente necesitan a LeBron James ahora mismo. ¿Todavía puede cumplir su cometido?

No es difícil imaginar el pensamiento de LeBron James mientras se acurrucaba con sus confidentes el verano pasado, trabajando con (o como) la oficina principal de los Lakers para armar el equipo con el que intentaría ganar otro título.

Necesitaba que los Lakers fueran más dinámicos a la ofensiva, por lo que buscó tiradores, viejos amigos como Carmelo Anthony que pudieran atrapar un dardo cruzado, levantarse y disparar. Sabía que tendrían que ser versátiles, por lo que el veterano Trevor Ariza se convirtió en una elección lógica.

Pero muchas de esas decisiones tuvieron que haber sido con la vista puesta en los playoffs, el único lugar donde los resultados realmente importan. Todo lo demás sería avanzar a un ritmo constante, esperando el momento adecuado para encender el motor y lanzarse hacia la línea de meta.

Mientras tanto, tenía que haber pensado, los All-Stars Russell Westbrook y Anthony Davis podrían hacer más del trabajo, aliviar algo de su carga y mantener a los Lakers en una buena posición hasta que el momento se vuelva más crítico.

Pero ahora más allá del umbral de los 30 juegos esta temporada, está claro que este plan estaba lleno de errores de cálculo, que Westbrook y Davis no estaban lo suficientemente juntos o no lo suficiente como pareja con los jugadores circundantes.

No, los Lakers necesitan mucho de James. Lo necesitan ahora. Y, por primera vez en más de una generación, podría ser más de lo que puede ofrecer.

Ya estaba haciendo una tonelada antes del domingo, cuando los Lakers comenzaron un tramo de un mes con Davis fuera de juego debido a un esguince de ligamento en su rodilla izquierda.

Diez días antes de cumplir 37 años, James tiene un promedio de 37,2 minutos por partido, 3,8 minutos más que la temporada pasada. Es el salto más grande de un año a otro en minutos jugados para James en sus 19 años de carrera.

Tienen marca de 11-8 con James en la cancha esta temporada, pero necesitaban que jugara más de 40 minutos en tres de esas victorias, y casi jugó 50 en una derrota en triple tiempo extra ante Sacramento.

Y ahora, con Davis fuera, es razonable esperar que los Lakers se inclinen más hacia las alineaciones con James jugando como centro, minutos que ciertamente parecen más exigentes físicamente en el lado defensivo.

Ariza, quien jugó el domingo por primera vez esta temporada luego de una cirugía de tobillo, ciertamente puede ayudar a mitigar parte de la presión defensiva con la que tienen que lidiar los Lakers ahora que Davis está fuera. Dijo que James jugar como centro no es algo que le preocupe.

“Creo que eso sería una ventaja. Es igual de grande, igual de fuerte”, dijo Ariza. “Está acostumbrado a jugar físicamente, a jugar a través del contacto. Entonces creo que sería un ajuste bastante fácil para él. Es un gran estudiante del juego. Individuo muy inteligente, jugador inteligente. Así que no creo que sea un gran desafío para él convertirse para hacer las cosas que estaba haciendo [el domingo]”.

Efectivamente, contra los Bulls, James tuvo 14 rebotes, el doble que el centro titular DeAndre Jordan, que jugó la mitad de minutos que James. Y cuando los Lakers tuvieron problemas para contener la posición en el último cuarto, una de las principales razones por las que no pudieron ganar, James estaba mirando a quien se perdió la asignación.

Durante los tramos en el segundo y tercer cuarto, los Lakers parecieron establecer un ritmo, y James estuvo en el medio durante muchos de esos tramos.

“Lo que el equipo realmente entendió fue cuánto necesitamos mover el balón para ser un equipo de baloncesto ofensivo con buen ritmo. Debido a que no tiene AD para reservar en 22 a 24, tal vez 30 en algunas noches, no puede reservar eso “, dijo el entrenador en jefe interino David Fizdale. “Así que tienes que confiar en el chico que está a tu lado para que te ayude. Obviamente [Westbrook] y Bron todavía pueden hacerlo, Carmelo contra ciertos enfrentamientos aún puede hacerlo, pero el movimiento de la pelota ... pensé que realmente lo aceptaron como clave para nuestro juego”.

Aún así, hay una parte de esto que parece que simplemente dependerá de Westbrook y James ser mejores, hacer más y llevar a su equipo a través de un tramo difícil.

“Quiero decir, instintivamente, eso es lo que te dices a ti mismo”, dijo Westbrook. “Pero también, tienes que leer el juego porque el juego siempre te dirá qué hacer, ya sea anotar más, pasar más, rebotar más, sea lo que sea. Pero, obviamente, AD es una gran parte de nuestro equipo. Y tenemos que descubrir cómo jugar sin él durante algún tiempo. Algo a lo que tenemos que adaptarnos y algo que podamos descubrir”.

Es difícil ver cómo la respuesta involucró a James haciendo menos y confiando más en los demás, especialmente con la lista lidiando con un brote de COVID-19 que ha hecho que los agujeros en la cancha sean aún más abiertos.

Contra uno de los horarios más livianos de la NBA, los Lakers han necesitado que James juegue más de lo que lo ha hecho en las últimas etapas de su mejor momento. Lo necesitaban para golpear a los oponentes de 7 pies.

Y los ha traído aquí, apenas por encima de .500.

Con el calendario a punto de cambiar, comenzando el martes contra Phoenix y con Davis tratando de recuperarse, el desafío es enorme. Y aunque apostar contra James le ha costado dinero a la gente durante mucho tiempo, el dinero inteligente finalmente podría estar cambiando.

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