California investigará si hay manipulación de precios en los altos costos del combustible del estado
El Gobernador Newsom le ha pedido al Fiscal General de California que investigue el alto costo de la gasolina de California.
SACRAMENTO — En referencia a los precios de la gasolina, que pueden ser 30 centavos más caros por galón que en otros estados, el gobernador Gavin Newsom pidió el lunes al procurador general del estado que investigue si los principales proveedores de petróleo de California están involucrados en la fijación de precios u otras prácticas injustas.
El pedido —que la fiscalía de Xavier Becerra ya adelantó que aceptará— ocurre en medio de la creciente frustración con los altos precios que se cobran en las comunidades de todo el estado. La investigación podría desencadenar la revisión más consecuente de los precios del combustible en California en años, eclipsando los esfuerzos ineficaces exigidos por los funcionarios electos en las últimas dos décadas. “No hay evidencia identificable para justificar estos precios premium”, escribió Newsom en una carta a Becerra.
El gobernador Newsom enfrenta críticas por sus decisiones sobre los $5 mil millones generados anualmente por los impuestos a la gasolina y las cuotas de los vehículos que fueron aumentados por una ley de 2017.
La solicitud de Newsom se produjo inmediatamente después de un muy esperado informe dado a conocer por la Comisión de Energía de California (CEC, por sus siglas en inglés) sobre el costo minorista de la gasolina en California. El documento, de 10 páginas y preparado después de que el gobernador le pidiera a la agencia en abril que examinara el tema, concluyó que los conductores del estado gastaron $1.5 mil millones más que los de otras partes en gasolina en 2018, aunque no hubo una diferencia determinable en el combustible que comercializan los diferentes minoristas.
“Las estaciones de marca, por lo tanto, cobran precios más altos por lo que parece ser el mismo producto”, escribieron los funcionarios de la comisión. “CEC no recibió respuesta de los minoristas de marca en respuesta a un pedido de información para respaldar sus reclamos de productos”.
La Comisión de Energía de California llegó a la conclusión de que la “manipulación del mercado” puede ser un factor por el cual los precios de la gasolina en el estado son tan altos y propuso un estudio de cinco meses para determinar por qué los automovilistas pagan más que los del resto del país.
En mayo, los funcionarios estatales concluyeron que la “manipulación del mercado” podría explicar los precios que pagan los conductores de California. Prometieron detalles adicionales para este mes, aunque el informe del lunes deja varias preguntas sin responder. Entre esas incógnitas se incluye por qué tantos residentes eligen un combustible de mayor precio en lugar de alternativas más baratas disponibles en algunos lugares. “Los usuarios pueden comprar marcas de gasolina más caras por conveniencia, porque aceptan tarjetas de crédito u otras razones”, escribieron los investigadores. “Sin embargo, si los competidores deciden colectivamente fijar los precios, esto puede ser ilegal”.
Severin Borenstein, profesor de la Escuela de Negocios Haas de UC Berkeley, quien estudia lo que él llama el “recargo misterioso” sobre el combustible que se vende en California, aplaudió la decisión de Newsom. “Realmente es hora de averiguar la razón”, dijo el lunes. “Los consumidores han gastado muchos miles de millones de dólares a lo largo de los años”.
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La investigación del docente descubrió que, incluso después de tener en cuenta los altos impuestos a la gasolina del estado y las reglas ambientales especiales, que imponen estándares de refinación más estrictos, los californianos pagaban aproximadamente 40 centavos más por galón a fines de 2018 que los conductores en otros estados —y el doble de lo que se había pagado la mayoría de los años desde 2015—.
Los funcionarios de la comisión estatal de energía indicaron en su informe que los desafíos de las refinerías, los estándares de refinación y los cierres o incidentes ocasionales en lugares concretos no explican la diferencia de costos. Y el informe concluyó que el repunte más notable había sido en los precios de las estaciones de servicio minoristas desde 2012 operadas por compañías que incluyen a Chevron y Shell.
“Estos incrementos de precios ocurrieron sin cambios significativos en la participación general de mercado de estas marcas a nivel minorista”, destacó el informe.
Los investigadores descubrieron que las ventas minoristas de gasolina de Chevron en California resultaron en casi $1.600 millones en ingresos durante 2018, más del doble de lo que generaron en 2010. Las ventas minoristas totales de Shell alcanzaron $818 millones en 2018, frente a $421 millones en 2010.
Un portavoz de Chevron remitió las preguntas a un grupo de la industria petrolera. El pedido de comentarios a Shell no fue respondido de inmediato.
Si bien los funcionarios de la comisión de energía escribieron que “no encontraron evidencia de actividades ilegales” por parte de las principales petroleras, también reconocieron que carecían de experiencia para llevar a cabo una investigación más exhaustiva, un defecto aparentemente resuelto por el pedido de Newsom a Becerra.
“El recargo misterioso se suma a los gastos, especialmente para las familias trabajadoras y conscientes de los costos”, escribió el gobernador en su carta a Becerra. “Si las petroleras están haciendo publicidad falsa o fijando los precios, entonces hay que tomar medidas legales para proteger al público”.
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Los precios del combustible en California siguen superando al del resto del país. El valor promedio por galón del estado hasta este lunes fue de $4.14, según AAA. El promedio nacional fue de casi $2.65 por galón.
Borenstein, quien previamente fue presidente del comité asesor del mercado petrolero para la comisión de energía, admitió que el pedido de una investigación profunda por parte del gobernador podría aumentar fácilmente la presión sobre un tema que, con mucha frecuencia, fue pasado por alto, incluso cuando le cuesta a los californianos buenas sumas de dinero. “Se necesitarán personas y recursos de investigación”, afirmó, acerca de la inminente indagación del fiscal general y el Departamento de Justicia de California. “Incluso si no encuentran ningún acto ilegal, o si hallan una causa, los investigadores pueden asesorar a la Legislatura para buscar soluciones”.
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