Anuncio

¿Qué tan malas serán las próximas semanas para California a medida que aumenten los casos de coronavirus?

El buque hospital Mercy de la Marina llegó al Puerto de Los Ángeles el 27 de marzo. El buque, que podría proporcionar 1.000 camas adicionales, no se utilizará para tratar a pacientes con COVID-19, pero aceptará enfermos con otros problemas médicos en un intento de aliviar la carga en los hospitales.
(Luis Sinco / Los Angeles Times)
Share

Mirando hacia el este, California puede imaginar su futuro con el coronavirus en los desbordados hospitales de la ciudad de Nueva York. Mirando hacia el oeste, podría tener la esperanza de un rápido declive de la enfermedad similar al que tuvieron las naciones asiáticas que rápidamente impusieron medidas estrictas de aislamiento físico a las personas infectadas.

Dos meses después del primer caso confirmado de la enfermedad respiratoria mortal en California, el estado se está preparando para enfrentar lo que las autoridades de salud pública consideran que será el mes más cruel, un abril que augura un pico en la enfermedad y la muerte.

Qué tan cruel será, queda por ver. Los funcionarios esperan que las fuertes limitaciones en el trabajo y la actividad pública, impuestas por el gobernador Gavin Newsom el 19 de marzo, y posteriormente incrementadas en algunas ciudades y condados, obstaculicen la propagación del COVID-19.

Anuncio

La enorme reingeniería social de los últimos días ha cerrado negocios y vaciado lugares públicos. Pero su efectividad final sigue siendo una de las múltiples incógnitas, que dependen de innumerables acciones de millones de californianos.

Preparándose para lo peor, los administradores de hospitales de todo el estado continuaron el viernes acondicionando todas las camas disponibles para una afluencia de pacientes.

San Francisco ordenó pruebas prioritarias para médicos y enfermeras para tratar de evitar que los profesionales de la salud contagiados se conviertan en súper propagadores de la enfermedad.

El condado de Los Ángeles cerró todas sus playas para limitar la interacción social. Y el buque hospital Mercy de la Marina cruzó el puerto de Los Ángeles, con 1,000 camas y 800 empleados listos para ayudar a facilitar el sistema de salud del condado.

El número de casos confirmados de coronavirus en California aumentó de 1.468 el domingo a 4.598 el viernes, mientras que las muertes incrementaron de 27 a 93. Pero debido a que el recuento de casos sigue dependiendo de las pruebas, que se están ampliando pero aún están por detrás de otros estados, la incidencia real de la enfermedad es ciertamente mucho más generalizada.

“Las cifras pueden ser enormes, lo que significa que las implicaciones para el sistema de salud son igualmente dramáticas”, dijo Bárbara Ferrer, directora de salud pública del condado de Los Ángeles. “Sin frenar la propagación, podríamos abrumar fácilmente nuestro sistema en el condado de Los Ángeles y todo el sistema de salud en California”.

Aunque una sobrecarga del sistema seguía siendo el temor, una proyección de unos epidemiólogos de la Universidad de Washington sugirió que la orden de “permanecer en casa” de California podría mantener la sobrecarga del hospital por debajo de los niveles catastróficos.

Y el Dr. Robert Kim-Farley, epidemiólogo de UCLA, manifestó que después de un aumento considerable en los casos, “deberíamos poder ver cierta nivelación de esos números en un par de semanas, debido a las medidas de distanciamiento físico”.

Si bien Estados Unidos ahora tiene el peor brote que cualquier país desarrollado en el mundo, el profesor de bioestadística de UC Berkeley, Nicholas Jewell, señaló que California pronto sabrá si sus límites al trabajo y el movimiento público han pagado dividendos.

Debido a un retraso de hasta dos semanas entre la transmisión de la enfermedad y la aparición de los síntomas, medir los beneficios del distanciamiento físico lleva tiempo. Con la orden de permanencia en el hogar de California, que tiene ocho días, las personas que reportaron la enfermedad podrían haberse infectado antes de ponerse en efecto.

“Necesitamos otra semana o dos para saber realmente si la ordenanza de ‘permanecer en casa’ en California hizo la diferencia”, indicó Jewell. “Tiene el potencial de hacer una gran diferencia. Lo sé matemáticamente... Pero no con ningún grado de certeza”.

Se estima que hay 2.5 millones de trabajadoras domésticas en todo el país. La mayoría no tienen acceso a la atención médica y el 83% no recibe pago por los días de enfermedad

Mar. 15, 2020

Algunos expertos siguen temerosos de que la curva de la enfermedad se reducirá, pero con un nivel peligroso que envíe a muchos pacientes a los hospitales durante meses. “El problema no es el tope de la ola epidémica”, consideró John Ioannidis, un experto en enfermedades infecciosas de la Universidad de Stanford. “El problema es: ¿cuánto tiempo estaremos por encima del punto de saturación del sistema médico?”.

Pero las proyecciones del Instituto de Medición y Evaluación de la Salud de la Universidad de Washington muestran que California podría terminar con un tope de casos más leve que el que se prevé que tenga el estado de Nueva York.

Mientras que el estado de Nueva York podría ubicar su peor número de muertes diarias en aproximadamente 550 decesos por el coronavirus en la segunda o tercera semana de abril, con un rango que incluye un mínimo de 124 muertes diarias hasta un máximo de 1,357 en el peor día posible -la simulación por computadora encontró que California podría tener su peor cifra de decesos diarios a fines de abril, tal vez alrededor de 150 muertes en un solo día.

El mejor de los casos pone el número de víctimas en California en dos decesos por día y una proyección en el peor de los casos prevé un total de 370 muertes diarias en el tope a fines de abril.

El estudio reconoce una serie de posibles resultados. En total, sugiere que California podría tener 6.109 decesos, pero hay una gran variación -tan pocas como 898 muertes y tantas como 13,650. Nueva York tendría 10,243 decesos, con tan pocas muertes como 5,167 y tantas como 26.444. Y, por ejemplo, el número de decesos en EE.UU podría oscilar entre 38,000 y 162,000.

Los investigadores de la Universidad de Washington advirtieron que sus proyecciones están cargadas con considerable incertidumbre, obtenidas de miles de ejecuciones de simulación por computadora para llegar a un resultado único y muy probable.

Una forma de evitar que los pasajeros cancelen sus planes de viaje es asegurarles que sus aviones y cruceros estén lo más libre de posible gérmenes

Mar. 3, 2020

A diferencia de otros modelos de la trayectoria del nuevo coronavirus, el estudio se basa en los recuentos de muertes de Estados Unidos y de todo el mundo. Los científicos creen que esas cifras son más confiables que contar el número confirmado de infecciones, que varían mucho debido a las tasas de pruebas dispares en todo EE.UU y el mundo.

Y las variaciones en la cantidad de camas de hospital que se necesitarán en California también divergieron enormemente, de tan sólo 1.200 a casi 36.000. La demanda de camas en UCI también obtuvo una proyección amplia, desde un mínimo de 90 hasta un máximo de 5.700.

“Lo que creemos que veremos es un tope bastante tardío en la epidemia en California, y eso se debe a que ha habido una trayectoria muy lenta de crecimiento, de muertes y casos”, manifestó el Dr. Chris Murray, autor del estudio. “Y eso puede deberse a un temprano distanciamiento social. No lo sabemos, pero ciertamente no es la trayectoria que estamos viendo en Nueva York, Luisiana o Georgia, por ejemplo”.

El debate sobre los posibles resultados se puso en claro en Silicon Valley, donde la ciudad de San José proyectó la cantidad de muertes posibles para la región, para que después los funcionarios del condado de Santa Clara cuestionaran de inmediato su estimación.

Funcionarios de la ciudad dijeron durante una discusión con el Concejo de la Ciudad de San José el jueves que proyectaban un número de muertos por la enfermedad en al menos 2,000 para Silicon Valley y hasta 16.000, para fines de mayo. Un día después, el condado de Santa Clara emitió un comunicado diciendo que no había “producido, revisado o examinado” las proyecciones de San José.

Las lecciones del extranjero parecen ser que las medidas de aislamiento físico pueden funcionar, declaró Kim-Farley, epidemióloga de UCLA.

Italia impuso órdenes estrictas de permanecer en el hogar, pero es probable que se pusieran en efecto sólo después de que el coronavirus se había extendido ampliamente. “Esperaría que dentro de una o dos semanas... la cantidad de casos o muertes disminuirá y, en última instancia, será cada vez menor, como vimos en China”, señaló Kim-Farley.

Tweets de pánico de triunfo mientras los mercados se desploman.

Mar. 10, 2020

Los expertos estadounidenses también investigarán en el extranjero lo qué sucede cuando se aflojan las reglas de separación social, como lo será cuando los chinos comiencen a volver a trabajar en las próximas semanas. “Es de esperar que no vean una segunda ola importante”, consideró Kim-Farley. “Esa es la pregunta del millón: ¿Qué pasará?”

La incertidumbre no aterrizó fácilmente con las enfermeras, los médicos y otros trabajadores del hospital que se están preparando para una avalancha de casos.

Una enfermera de la sala de emergencias de un gran hospital en Los Ángeles dijo que la ansiedad está aumentando entre el personal a medida que incrementa el número de pacientes con COVID-19, con los temores exacerbados por la escasez mundial de equipo de protección.

“Muchos de nosotros tenemos mucho miedo de ir a trabajar”, reveló la enfermera, que no estaba autorizada por su institución para hablar con los medios. “Nuestras familias están literalmente asustadas cuando llegamos a casa del trabajo”. Cuando ve a personas fuera del hospital que no cumplen con las reglas de distanciamiento físico, se enoja, reconoció.

“Ojalá pudiéramos quedarnos en casa también”, dijo la enfermera, que se negó a que se use su nombre. “Pero no podemos”.

Una enfermera de quirófano en un hospital de Kaiser Permanente en el condado de Los Ángeles compartió esa sensación y señaló que la orientación sobre cómo los trabajadores deberían protegerse mejor a sí mismos cambia diariamente, con las pautas cada vez menos rigurosas.

“Todos nos sentimos como, ‘¿en qué mundo nos metimos?’. Esto no es para lo que nos inscribimos”, dijo la enfermera, quien también pidió no ser identificada. “No pensamos que alguna vez estaríamos en la posición de trabajadores de la salud de un país del Tercer Mundo, en medio del bosque... Ha sido un caos”.

Otra incógnita es cómo la población sin hogar de California afectará la crisis.

California tiene más de 150,000 personas en condiciones de vivienda inestables, con 108,000 viviendo al aire libre. Las decenas de miles de individuos que viven en la calle representan un riesgo para los hospitales porque son especialmente susceptibles a los casos graves del nuevo coronavirus: están envejeciendo, a menudo tienen condiciones de salud subyacentes y viven en entornos donde la higiene es difícil.

El investigador de Boston, Thomas Byrne, compara la población sin hogar con la de los hogares de ancianos y señala que quienes viven en la calle a menudo tienen condiciones médicas similares a las de personas confinadas 20 años de edad más viejas.

Byrne publicó un estudio esta semana que predice que hasta 2.600 personas sin hogar en Los Ángeles podrían terminar en hospitales con el coronavirus, y alrededor de 900 podrían necesitar cuidados intensivos, lo que inmovilizaría recursos cruciales.

El gobernador Gavin Newsom puso en marcha la semana pasada un ambicioso plan para trasladar a decenas de miles de personas sin hogar a hoteles y moteles. Pero hasta ahora, sólo unos pocos miles de desamparados en todo el estado han sido reubicados en refugios y algunos cientos en las primeras habitaciones disponibles -aunque Newsom dijo que más de 4.000 han sido alquiladas o compradas.

Kim-Farley instó a los californianos a mantener la esperanza, diciendo: “Hay vida después del COVID-19. No es una amenaza existencial para toda la humanidad. Vamos a superar esto”.

Para leer esta nota en inglés haga clic aquí

Anuncio